Luego de conocerse la destitución de varios alcaldes en lo que va del año, entre estos, el de Moyogalpa, el Observatorio ciudadano independiente para el monitoreo de procesos electorales de Nicaragua, Urnas Abiertas, aseguró que en dicha alcaldía no se encontró ninguna evidencia de corrupción, ni responsabilidad penal ni administrativa por parte de los funcionarios públicos en auditorías realizadas por Contraloría General de la República (CGR) entre 2015-2020, por lo que la destitución podría demostrar que la dictadura no utiliza los procedimientos establecidos.
Esto debido a que, circulan versiones extraoficiales de que Abiud Saballos Arcia, fue removido por supuestos actos de corrupción, algo que hasta ahora no es confirmado por las autoridades.
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“La información pública de la CGR demuestra que no se están siguiendo los mecanismos institucionalizados para prevenir, perseguir y castigar la corrupción. Por el contrario, destituciones como estas solamente demuestran que el gobierno central mueve a conveniencia a los operadores políticos locales, sin una verdadera vocación de defender los recursos públicos y exigir transparencia”, señala Urnas Abiertas.
La alcaldía de Moyogalpa recibió tres auditorías especiales en ese período, donde no se encontró ninguna responsabilidad penal ni administrativa por parte de los funcionarios públicos de ese momento.
Abiud Saballos Arcia es el cuarto funcionario destituido por el régimen de Daniel Ortega en menos de un año.
Saballos Arcia, asumió el cargo de alcalde de Moyogalpa en enero de este 2032, cuando en noviembre del 2022, el Consejo Supremo Electoral, (CSE), oficializó el traspaso de las municipalidades al Frente Sandinista a través de los comicios irregulares.
Canibalismo de la dictadura con alcaldes sandinistas
En los primeros siete meses del gobierno edilicio, ya suman cuatro alcaldes destituidos por el régimen sandinista.
El primero es Jaime Aráuz, exalcalde de El Tuma-La Dalia, en Matagalpa, quien duró nueve días en la silla edilicia. Aráuz estuvo como alcalde durante 22 años. Tras una intervención del Inifom, asumió en su lugar la vicealcaldesa Francis Lucila Tórrez. Aráuz por su lado, dijo que se debía a problemas de salud.
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El segundo alcalde que corrió la misma suerte fue Pedro Pablo Vargas, exalcalde de Granada, quien dejó el puesto el 9 de marzo, después de que el Concejo orteguista le exigiera la renuncia. Vargas fue obligado a decir que también renunció por problemas de salud.
El 30 de mayo, le tocó dejar su silla edilicia a la alcaldesa designada del municipio de Ciudad Darío, Matagalpa, María Lesbia Treminio. De forma extraoficial se conoció que fue señalada de supuesta corrupción, nepotismo y malversación de fondos. En su lugar, fue ubicada la maestra y concejal sandinista, Maritza Eleonora Ruiz Matamoros, y como vicealcalde a Arsenio Rayo Flores.
