Este viernes, Daniel Ortega nominó a Valdrack Jaentschke, destacado diplomático orteguista, para ocupar el cargo de Secretario General del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), sucediendo a Werner Vargas, quien renunció el martes pasado.
Actualmente, la Secretaría General del SICA recae en Nicaragua. La dictadura presentó una terna encabezada por Jaentschke, junto a Violeta Irías e Irís Marina Montenegro Blandón, aunque este proceso se percibe como un mero formalismo, dado que se requiere presentar tres candidatos.
La designación de Valdrack Jaentschke Whitaker parece inevitable, siendo exviceministro de Relaciones Exteriores y ministro consejero con funciones consulares en Costa Rica desde julio de 2022, tras el retiro del embajador Duilio Hernández Avilés.
En una carta dirigida a su homóloga salvadoreña, el canciller Denis Mocada, en representación de Nicaragua, solicita con urgencia la convocatoria de una reunión del Consejo de Ministros de Relaciones Exteriores y Reunión de Presidentes del SICA para la elección expedita del nuevo Secretario General.
Werner Vargas, al renunciar alegando “razones personales”, deja vacante el cargo para el cual fue ratificado por los presidentes centroamericanos en agosto de 2022.
Rechazo a la Terna Orteguista
Haydée Castillo, miembro del comité consultivo del SICA, rechaza la terna propuesta de Ortega, argumentando que los nominados están subordinados a los intereses de la dictadura. Castillo insta a que la secretaría general pase a Costa Rica, considerando la oportunidad dada por la renuncia de Vargas.
Según la activista Alexa Zamora, la renuncia de Vargas revela una crisis institucional en el SICA, que estuvo sin secretario general por más de un año debido a la falta de candidatos aptos y apoyo de los estados miembros.
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El SICA, esencial para proyectos y acuerdos extrarregionales, necesita un secretario general para su ejecución administrativa. Zamora hace un llamado a los presidentes de la región para evitar crisis institucionales y velar por los intereses de Centroamérica.